En 2025, el ex presidente de EE. UU. Donald Trump regresó a la Casa Blanca, centrándose en Bitcoin La serie de políticas y acciones personales lanzadas no solo agitaron el mercado de la encriptación, sino que también influyeron profundamente en el camino de desarrollo de los activos digitales globales. Desde la emisión de Meme coins personales hasta la promoción Bitcoin como activo de reserva estratégica nacional, la ‘ambición de encriptación’ de Trump está remodelando el panorama de la industria.
La actitud de Trump hacia Bitcoin ha experimentado un cambio drástico. Ya en 2019, criticó públicamente a las criptomonedas como ‘no dinero’; pero durante la campaña electoral de 2024, prometió en voz alta ‘convertir a América en la capital global de las criptomonedas’ y rápidamente tomó medidas después de asumir el cargo.
En marzo de 2025, Trump firmó una orden ejecutiva para incluir Bitcoin en los activos de reserva estratégica nacionales, al mismo nivel que el oro, y reveló que el gobierno de EE. UU. posee actualmente aproximadamente 200,000 Bitcoins (principalmente de incautaciones judiciales), con planes de establecer un sistema de reserva similar a una “versión digital de Fort Knox”.
Su lógica de toma de decisiones incluye:
A pesar de la respuesta moderada del mercado a corto plazo (Bitcoin cayó brevemente un 4%), la política proporciona un importante ancla de confianza para los inversores institucionales a largo plazo. Los analistas de Vaneck se refirieron a ella como un “hit milestone” para la inclusión de Bitcoin en las carteras de activos mainstream.
La ‘capacidad de marketing’ de la familia Trump en el campo de la criptografía es fenomenal. En enero de 2025, Trump emitió su propia moneda Meme personal TRUMP, que se disparó un 15,000% en solo 12 horas, con un valor de mercado que superó los 800 mil millones de dólares, llevando a la plataforma de trading Moonshot al primer puesto de las clasificaciones de la App Store de Apple. La moneda MELANIA lanzada por su esposa, Melania, también se disparó en dos horas, pero luego la moneda TRUMP se desplomó un 60%, exponiendo el alto riesgo especulativo altamente dependiente del efecto de celebridad.
Se han desatado controversias en la industria que incluyen:
A pesar de la controversia en curso, la emisión de la moneda de Trump inyectó objetivamente nuevo tráfico en el mercado de la criptografía. Los socios de DWF Labs lo calificaron como el “marketing más efectivo en la industria”.
El 7 de marzo de 2025, Trump organizó la primera cumbre de criptomonedas en la Casa Blanca, invitando a muchos Web3 Los ejecutivos corporativos discuten la claridad regulatoria y la adopción institucional.
La Secretaria del Tesoro de los Estados Unidos, Bettson, declaró en la reunión que las monedas estables pueden utilizarse para fortalecer la posición global del dólar estadounidense, y prometió poner fin a la ‘weaponization of regulation’ y promover recortes de impuestos y reformas de claridad regulatoria.
La espada de doble filo de los efectos de la política:
La estrategia de “América Coin First” de Trump está reconfigurando la estructura de poder de la industria:
La política de cifrado de Trump es como una ‘tormenta controlada,’ que trae volatilidad a corto plazo y controversia sobre la centralización, al mismo tiempo que libera dividendos políticos y atención global. Bajo la influencia de Trump, aunque el precio de Bitcoin fluctúa con frecuencia, sus valores fundamentales de descentralización y resistencia a la censura finalmente trascenderán los ciclos políticos. Como lo expresan los analistas, ‘Bitcoin no pertenece a ningún político; es el Arca de Noé digital de nuestro tiempo.’
En el futuro, la industria de la encriptación enfrentará un problema fundamental: cómo lograr un equilibrio entre los dividendos políticos y los ideales descentralizados. Y el “experimento de encriptación” de Trump proporciona sin duda un ejemplo de la vida real altamente controvertido para esta proposición.