En las discotecas de las afueras de Vancouver, las burbujas de champán brillan bajo las luces, y los nombres raros de Telegram alcanzan precios exorbitantes. Pero tras esta fiesta, un joven llamado Haby que vive en Abbotsford, Columbia Británica, utilizó un método muy clásico — hacerse pasar por el servicio de atención al cliente de un exchange— y en solo un año, se llevó más de 2 millones de dólares de los bolsillos de inversores de todo el mundo.
El detective en blockchain ZachXBT publicó los resultados de su investigación el 29 de diciembre. La frase más impactante fue: esto no fue un fallo en el sistema del exchange, sino que alguien explotó una vulnerabilidad en la confianza. La ingeniería social, así de simple y efectiva.
¿Y cómo encontraron a este tipo? ZachXBT utilizó técnicas de inteligencia de código abierto— rastrear transferencias en la cadena, analizar publicaciones en redes sociales, examinar capturas de pantalla de teléfonos. La pista más crucial vino de una grabación que se filtró: Haby estaba haciendo una llamada de estafa, y accidentalmente la cámara capturó su correo personal y el número vinculado a Telegram. Solo con ese pequeño detalle, el rompecabezas quedó completo.
La lección de todo esto es sencilla y dolorosa: los exchanges oficiales nunca te pedirán tu contraseña de forma proactiva, y el servicio de atención al cliente nunca te pedirá verificar tu identidad por Telegram en privado. Pero aún así, hay quienes caen en la trampa todos los días. ¿Qué deben hacer los inversores? No confiar ciegamente en que el exchange te protegerá al 100%. La regla de cero confianza es la base para sobrevivir: verificar toda la información, preguntar dos veces por cada solicitud, y no hacer clic en enlaces sin escribirlos manualmente.
Este caso también revela un problema adicional: la vacancia en la cooperación internacional en la aplicación de la ley. La estafa ocurre a nivel global, y el dinero se transfiere por múltiples canales, por lo que recuperar fondos es extremadamente difícil. ¿Cómo se filtraron los datos internos del exchange? ¿Quién está vendiendo información de los usuarios en el mercado negro? Estas preguntas aún permanecen sin respuesta.
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StrawberryIce
· hace14h
La ingeniería social es increíble, pienso en cómo proteger mi billetera todos los días, pero aún así es difícil de prevenir.
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GateUser-74b10196
· hace14h
La ingeniería social es realmente impresionante, 2 millones de dólares se han ido así... Lo más importante es la filtración de datos internos de la plataforma, ¿quién demonios está revendiendo la información de los usuarios?
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RugPullProphet
· hace14h
Otra vez la misma táctica de ingeniería social, en realidad lo que más se rompe es la confianza. Perder 2 millones así realmente es una locura.
En las discotecas de las afueras de Vancouver, las burbujas de champán brillan bajo las luces, y los nombres raros de Telegram alcanzan precios exorbitantes. Pero tras esta fiesta, un joven llamado Haby que vive en Abbotsford, Columbia Británica, utilizó un método muy clásico — hacerse pasar por el servicio de atención al cliente de un exchange— y en solo un año, se llevó más de 2 millones de dólares de los bolsillos de inversores de todo el mundo.
El detective en blockchain ZachXBT publicó los resultados de su investigación el 29 de diciembre. La frase más impactante fue: esto no fue un fallo en el sistema del exchange, sino que alguien explotó una vulnerabilidad en la confianza. La ingeniería social, así de simple y efectiva.
¿Y cómo encontraron a este tipo? ZachXBT utilizó técnicas de inteligencia de código abierto— rastrear transferencias en la cadena, analizar publicaciones en redes sociales, examinar capturas de pantalla de teléfonos. La pista más crucial vino de una grabación que se filtró: Haby estaba haciendo una llamada de estafa, y accidentalmente la cámara capturó su correo personal y el número vinculado a Telegram. Solo con ese pequeño detalle, el rompecabezas quedó completo.
La lección de todo esto es sencilla y dolorosa: los exchanges oficiales nunca te pedirán tu contraseña de forma proactiva, y el servicio de atención al cliente nunca te pedirá verificar tu identidad por Telegram en privado. Pero aún así, hay quienes caen en la trampa todos los días. ¿Qué deben hacer los inversores? No confiar ciegamente en que el exchange te protegerá al 100%. La regla de cero confianza es la base para sobrevivir: verificar toda la información, preguntar dos veces por cada solicitud, y no hacer clic en enlaces sin escribirlos manualmente.
Este caso también revela un problema adicional: la vacancia en la cooperación internacional en la aplicación de la ley. La estafa ocurre a nivel global, y el dinero se transfiere por múltiples canales, por lo que recuperar fondos es extremadamente difícil. ¿Cómo se filtraron los datos internos del exchange? ¿Quién está vendiendo información de los usuarios en el mercado negro? Estas preguntas aún permanecen sin respuesta.