Fuente: Coindoo
Título original: La Reserva Central de Japón Prepara los Mercados para Más Subidas de Tipos
Enlace original:
Las discusiones internas muestran que varios responsables de política monetaria están cada vez más incómodos con lo lejos que los tipos de interés se quedan atrás de la inflación.
Algunos advirtieron que mantener los costes de endeudamiento demasiado bajos corre el riesgo de debilitar aún más el yen y de consolidar presiones de precios en toda la economía. En su opinión, la diferencia entre la política actual y un nivel “neutral” sigue siendo lo suficientemente amplia como para justificar movimientos adicionales, posiblemente espaciados solo unos meses.
Puntos clave
Los responsables del BOJ prefieren seguir subiendo los tipos, posiblemente cada pocos meses
El yen débil y la inflación persistente están impulsando la urgencia
El gobierno apoya el endurecimiento, pero quiere cautela respecto al impacto en los negocios
La era del dinero ultrabarato en Japón se acerca cada vez más a un quiebre decisivo. Dentro del Banco de Japón, los responsables de política están señalando cada vez más que la subida de tipos de diciembre no fue un ajuste puntual, sino parte de un cambio más amplio hacia un control monetario más estricto.
En lugar de debatir si los tipos deben subir nuevamente, las discusiones internas ahora se centran en la frecuencia con la que deben ocurrir los aumentos. Algunos responsables argumentan que los tipos de interés en Japón siguen estando muy por debajo de los niveles que restringirían la inflación, especialmente cuando se ajustan por el crecimiento de los precios. En su opinión, esperar demasiado tiempo corre el riesgo de que las expectativas de inflación se consoliden.
La debilidad de la moneda ha añadido urgencia. Varios responsables señalaron la fragilidad del yen como evidencia de que los costes de endeudamiento están desalineados con las condiciones económicas. Una brecha prolongada entre la inflación y los tipos de política, advirtieron, podría empeorar las presiones de precios y desestabilizar los mercados de bonos a largo plazo.
Aún así, no todos apoyan un camino agresivo. Un grupo más cauteloso pidió flexibilidad, señalando que los tipos de interés neutrales son difíciles de definir y que las condiciones financieras globales siguen siendo fluidas. Enfatizaron la importancia de monitorizar de cerca los datos económicos en lugar de comprometerse con un calendario fijo de endurecimiento.
La confianza en la resiliencia interna de Japón parece estar creciendo. Los responsables expresaron optimismo de que la economía puede absorber tipos más altos, apoyada por un crecimiento salarial constante y el gasto gubernamental. La inflación, por su parte, se ve cada vez más como persistente en lugar de temporal, impulsada por cambios estructurales en el comportamiento de fijación de precios de las empresas y por una debilidad sostenida del yen.
Los representantes del gobierno que asistieron a la reunión no se opusieron a la subida de diciembre, señalando una alineación política con la dirección del banco central. Sin embargo, advirtieron que la inversión empresarial y la rentabilidad necesitarán un seguimiento cercano a medida que suban los costes de endeudamiento.
La conclusión de las discusiones es clara: Japón ya no está debatiendo una salida del dinero fácil, sino la velocidad de la normalización.
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El Banco Central de Japón prepara los mercados para más aumentos de tasas
Fuente: Coindoo Título original: La Reserva Central de Japón Prepara los Mercados para Más Subidas de Tipos Enlace original:
Las discusiones internas muestran que varios responsables de política monetaria están cada vez más incómodos con lo lejos que los tipos de interés se quedan atrás de la inflación.
Algunos advirtieron que mantener los costes de endeudamiento demasiado bajos corre el riesgo de debilitar aún más el yen y de consolidar presiones de precios en toda la economía. En su opinión, la diferencia entre la política actual y un nivel “neutral” sigue siendo lo suficientemente amplia como para justificar movimientos adicionales, posiblemente espaciados solo unos meses.
Puntos clave
La era del dinero ultrabarato en Japón se acerca cada vez más a un quiebre decisivo. Dentro del Banco de Japón, los responsables de política están señalando cada vez más que la subida de tipos de diciembre no fue un ajuste puntual, sino parte de un cambio más amplio hacia un control monetario más estricto.
En lugar de debatir si los tipos deben subir nuevamente, las discusiones internas ahora se centran en la frecuencia con la que deben ocurrir los aumentos. Algunos responsables argumentan que los tipos de interés en Japón siguen estando muy por debajo de los niveles que restringirían la inflación, especialmente cuando se ajustan por el crecimiento de los precios. En su opinión, esperar demasiado tiempo corre el riesgo de que las expectativas de inflación se consoliden.
La debilidad de la moneda ha añadido urgencia. Varios responsables señalaron la fragilidad del yen como evidencia de que los costes de endeudamiento están desalineados con las condiciones económicas. Una brecha prolongada entre la inflación y los tipos de política, advirtieron, podría empeorar las presiones de precios y desestabilizar los mercados de bonos a largo plazo.
Aún así, no todos apoyan un camino agresivo. Un grupo más cauteloso pidió flexibilidad, señalando que los tipos de interés neutrales son difíciles de definir y que las condiciones financieras globales siguen siendo fluidas. Enfatizaron la importancia de monitorizar de cerca los datos económicos en lugar de comprometerse con un calendario fijo de endurecimiento.
La confianza en la resiliencia interna de Japón parece estar creciendo. Los responsables expresaron optimismo de que la economía puede absorber tipos más altos, apoyada por un crecimiento salarial constante y el gasto gubernamental. La inflación, por su parte, se ve cada vez más como persistente en lugar de temporal, impulsada por cambios estructurales en el comportamiento de fijación de precios de las empresas y por una debilidad sostenida del yen.
Los representantes del gobierno que asistieron a la reunión no se opusieron a la subida de diciembre, señalando una alineación política con la dirección del banco central. Sin embargo, advirtieron que la inversión empresarial y la rentabilidad necesitarán un seguimiento cercano a medida que suban los costes de endeudamiento.
La conclusión de las discusiones es clara: Japón ya no está debatiendo una salida del dinero fácil, sino la velocidad de la normalización.