Solo los traders más ingenuos seguirían persiguiendo caídas en estas condiciones de mercado. Cuando el contexto macroeconómico cambia y el sentimiento se enfría, tratar cada retroceso como una oportunidad de compra se convierte en una receta para el desastre. La verdadera pregunta no es si las caídas rebotarán, sino si este ciclo en particular todavía tiene suficiente combustible. Presta atención a lo que los gráficos realmente te están diciendo, no a lo que quieres que digan.