Últimamente, el mercado de metales preciosos también ha caído en picado, y ahora no solo los que hacen trading con criptomonedas están perdiendo dinero. Al ver la caída del oro y la plata, finalmente entendí una cosa: sin importar qué tipo de activo manejes, cuando el mercado está mal, nadie puede escapar.

Los amigos del mundo cripto suelen bromear diciendo que el mercado es malo y que la volatilidad es alta, pero si miramos todo el mercado financiero, las materias primas, las acciones y los bonos, también han caído bastante últimamente. Esta gran corrección en los metales preciosos, en realidad, nos ha dejado claro: en tiempos de bajón del mercado, ninguna categoría de activos es absolutamente segura. Esos que llaman "activos refugio", cuando hay tensión en la liquidez y la aversión al riesgo aumenta, también no pueden resistir la presión de venta.

En definitiva, cuando el entorno no es favorable, el capital no mira si estás en activos tradicionales o emergentes, sino que se dirige en masa hacia activos seguros (como el dólar). Esta corrección en los metales preciosos simplemente ha confirmado esto. En lugar de preocuparte por tus decisiones, es mejor entender el panorama general: tanto en la cadena como fuera de ella, el riesgo es compartido.