La mayoría de los esquemas de asignación de tokens pasan por alto las recompensas comunitarias o las tratan como secundarias. Eche un vistazo más de cerca a cómo algunos protocolos emergentes están invirtiendo esto. Uno de los destacados pone la participación comunitaria en el centro—el 45% del suministro de tokens fluye directamente a traders activos, constructores y contribuyentes de tarifas. Esa es la mayor parte. En lugar de apostar por la tenencia pasiva, el protocolo se basa en la premisa de que la actividad real impulsa el valor. Es una apuesta diferente sobre qué hace que una red prospere.