En los años que he estado en el mundo de las criptomonedas, la lección más valiosa que he aprendido es: no complicar las cosas.

Recuerdo cuando empecé, perseguía frenéticamente los indicadores técnicos, pasaba las noches revisando noticias internacionales en la computadora, y no podía dejar de hacer operaciones cada segundo. ¿El resultado? En menos de tres meses, mi capital se redujo un 30%. Entonces entendí que los métodos llamativos no siempre funcionan, y que las estrategias más sencillas, si se mantienen, pueden generar ganancias estables.

Empecé con 10.000 y, con los años, desarrollé un método "tonto" que me permitió duplicar mi patrimonio, pasando de una rentabilidad anual del 30%. Lo más importante es que ya no tengo que preocuparme por el mercado hasta altas horas de la noche.

**Cuatro principios, que sostienen todo mi sistema de trading**

Para poder durar en este mundo, hay que seguir estas reglas.

Primero: invierte solo dinero que puedas permitirte perder. Distribuyo mis fondos siguiendo la regla de "100 menos tu edad", destinando una parte a activos de alto riesgo y el resto a inversiones seguras. Las oportunidades en el mercado aparecen una tras otra; lo que realmente falta es paciencia y capital preparado.

Segundo: no sueñes con pescar todo el pez. Renuncié a la idea de comprar en el mínimo y vender en el máximo. Basta con comer la parte del pez que se puede, y dejar la cabeza y la cola a otros. Este cambio de mentalidad me liberó por completo de la obsesión por la perfección en las operaciones.

Tercero: nunca pongas todo en una sola operación. He visto a demasiadas personas arriesgarlo todo y perderlo todo en un solo golpe. Tener todo en una sola posición te ata, no deja margen de maniobra. Siempre habrá otra oportunidad en el mercado, no hay que apurarse.

Cuarto: compra en las caídas y vende en las subidas. Suena fácil, pero en la práctica es difícil; esto requiere verdadera autodisciplina. Mantén la calma cuando otros entran en pánico y compran en la parte alta, y sé paciente cuando el mercado sube sin parar.

Estas ideas son muy simples, pero muy pocos pueden seguirlas a largo plazo.