El sector cripto necesita desesperadamente un mercado de futuros de gas onchain y sin confianza. Piénsalo como un mercado de predicción basado en BASEFEE: una forma de cubrirse frente a la volatilidad de los costes de transacción sin depender de intermediarios centralizados.

Actualmente, las comisiones de gas son relativamente manejables. Pero este es el escepticismo que sigo escuchando de desarrolladores y usuarios: "Claro, los costes son bajos hoy, pero ¿qué pasará dentro de dos años?" Los optimistas señalan las próximas soluciones de escalado: el aumento gradual del gaslimit a través de BAL, las mejoras de eficiencia de ePBS y, finalmente, los despliegues de ZK-EVM que podrían comprimir los costes aún más.

Sin embargo, persiste la duda. ¿Podemos confiar realmente en esas promesas? Precisamente ahí es donde un mecanismo descentralizado de futuros de gas se vuelve crucial. En lugar de fiarse de la palabra de alguien, los participantes podrían operar según sus expectativas sobre las condiciones futuras de la red. Especuladores apostando por comisiones bajas sostenidas frente a quienes se cubren ante picos de congestión: fuerzas de mercado puras que revelan previsiones colectivas.

Un mercado así no solo ofrecería descubrimiento de precios. Crearía incentivos económicos reales para la predicción precisa y proporcionaría a los desarrolladores datos tangibles para planificar infraestructuras a largo plazo. Nada de vaguedades sobre hojas de ruta técnicas; solo posiciones respaldadas por capital real en juego.