Tom Lee acaba de soltar una bomba: Bitcoin ya ha tocado fondo, y los verdaderos fuegos artificiales llegarán en los próximos dos meses.

Olvídate del ciclo tradicional de cuatro años que todos repiten. Lee apuesta a que vamos a destrozar ese manual anticuado en ocho semanas. ¿Una predicción arriesgada? Sin duda. Pero cuando uno de los mayores alcistas de BTC en Wall Street habla, los mercados escuchan.

La configuración está ahí: el entorno macroeconómico está cambiando, el sentimiento se está desplazando y el dinero institucional está al acecho. Si tiene razón, no estamos ante otra subida lenta; estamos ante una posible ruptura que reescribe las reglas del juego.