La guerra de los chips de IA todavía está en sus primeras etapas, y dos gigantes tecnológicos ya han apostado en la dirección correcta.
NVIDIA se ha beneficiado del auge de la IA gracias a sus GPU. Los ingresos del segundo trimestre se dispararon un 101% en comparación con el año anterior, y el EPS ajustado se disparó un 429%, todo esto debido a la "loca" demanda de chips de IA en los centros de datos. Las previsiones de la industria indican que el mercado de chips de IA pasará de los 28 mil millones de dólares actuales a 165 mil millones de dólares para 2030. NVIDIA, como líder en GPU, seguirá teniendo buenos tiempos mientras el viento de la IA siga soplando.
La estrategia de Microsoft es más agresiva: invirtió 13 mil millones de dólares en OpenAI a cambio del 49% de las acciones y derechos de dividendos continuos. Este dinero permitió a Microsoft obtener temprano la tecnología de IA más avanzada para fortalecer la competitividad de su servicio en la nube Azure. Según las predicciones de Morgan Stanley, el mercado de la computación en la nube de IA podría alcanzar los 647 mil millones de dólares para 2030, y Microsoft ya es el jugador principal en la segunda fila de la computación en la nube. Con la carta de Azure en mano, es muy probable que los pedidos de infraestructura de IA del futuro terminen en su bolsillo.
Sin embargo, hay que recordar que el crecimiento nunca es lineal. Incluso si estas dos empresas han acertado con la gran tendencia de la IA, inevitablemente habrá momentos de desaceleración en el crecimiento trimestral. Lo clave es no dejarse asustar por las fluctuaciones a corto plazo y vender en pérdidas; mientras los fundamentos de la empresa no cambien, hay que mantener la inversión.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
La guerra de los chips de IA todavía está en sus primeras etapas, y dos gigantes tecnológicos ya han apostado en la dirección correcta.
NVIDIA se ha beneficiado del auge de la IA gracias a sus GPU. Los ingresos del segundo trimestre se dispararon un 101% en comparación con el año anterior, y el EPS ajustado se disparó un 429%, todo esto debido a la "loca" demanda de chips de IA en los centros de datos. Las previsiones de la industria indican que el mercado de chips de IA pasará de los 28 mil millones de dólares actuales a 165 mil millones de dólares para 2030. NVIDIA, como líder en GPU, seguirá teniendo buenos tiempos mientras el viento de la IA siga soplando.
La estrategia de Microsoft es más agresiva: invirtió 13 mil millones de dólares en OpenAI a cambio del 49% de las acciones y derechos de dividendos continuos. Este dinero permitió a Microsoft obtener temprano la tecnología de IA más avanzada para fortalecer la competitividad de su servicio en la nube Azure. Según las predicciones de Morgan Stanley, el mercado de la computación en la nube de IA podría alcanzar los 647 mil millones de dólares para 2030, y Microsoft ya es el jugador principal en la segunda fila de la computación en la nube. Con la carta de Azure en mano, es muy probable que los pedidos de infraestructura de IA del futuro terminen en su bolsillo.
Sin embargo, hay que recordar que el crecimiento nunca es lineal. Incluso si estas dos empresas han acertado con la gran tendencia de la IA, inevitablemente habrá momentos de desaceleración en el crecimiento trimestral. Lo clave es no dejarse asustar por las fluctuaciones a corto plazo y vender en pérdidas; mientras los fundamentos de la empresa no cambien, hay que mantener la inversión.