Los ganadores invisibles de la era de la energía verde: ¿por qué el dinero inteligente está acumulando cobre?

La revolución de la energía limpia está transformando silenciosamente el mercado global de commodities. Según S&P Global, se prevé que la demanda de cobre se dispare un 82% entre 2021 y 2035; ¿cuál es la lógica detrás de este número?

Es muy simple: el cobre es la sangre de la infraestructura energética verde. Paneles solares, turbinas eólicas, baterías de vehículos eléctricos, redes de carga… todos estos pilares de energía nueva dependen del cobre. Además, el cobre tiene cuatro grandes ventajas: la conductividad más alta (invencible entre los metales no preciosos), gran plasticidad, eficiencia térmica 60% superior al aluminio, y es reciclable de forma indefinida.

Pero aquí hay una paradoja: El precio del cobre ha estado cayendo recientemente. China, como el mayor consumidor de cobre del mundo, ha visto una demanda débil que ha afectado a todo el mercado. El cobre a plazo de marzo incluso cayó a su punto más bajo desde mediados de noviembre.

Para los inversores, en realidad es una oportunidad. Si tienes confianza en la tendencia de energía verde a largo plazo, puedes asignar exposición al cobre a través de ETFs:

• CPER: sigue directamente los futuros del cobre, el más puro
• COPX: Conjunto de mineras de cobre, incluyendo a Freeport y otros líderes (escala de 14 mil millones de dólares)
• COPJ: pequeños mineros, más agresivos
• ICOP: cobre + otros minerales metálicos, gestión de Blackrock (tasa solo 0.47%)
• PICK: Minerales metálicos diversos, no solo cobre

Ahora es un buen momento para una disposición inversa: cuando el mercado reaccione a la demanda de energía limpia, puede que ya sea demasiado tarde.