La semana pasada Ripple volvió a moverse: adquirió Palisade, un proveedor de monederos digitales y servicios de custodia. No se trata de una operación menor, sino de otro movimiento estratégico de Ripple en el ámbito de la infraestructura institucional, tras una serie de adquisiciones como Hidden Road, Rail y GTreasury.
¿En qué se está gastando el dinero?
Este año, Ripple ha invertido cerca de 4.000 millones de dólares en fusiones y adquisiciones, con una frecuencia de movimientos bastante intensa. Analicemos la lógica detrás de estas adquisiciones:
Hidden Road → Ripple Prime (capacidad de bróker institucional líder)
Rail → Infraestructura para la emisión de stablecoins
GTreasury → Gestión de tesorería corporativa
Palisade → Custodia de activos digitales y soporte cross-chain
Estas adquisiciones, en conjunto, cubren prácticamente toda la cadena de valor, desde pagos y trading hasta la custodia.
¿Por qué es tan importante la custodia?
Desde Ripple lo dejan claro: “Una custodia segura de activos digitales es la base para desbloquear la economía cripto”. La pila tecnológica de Palisade utiliza computación multipartita (MPC) y arquitectura de zero-trust, que actualmente es el estándar para la gestión institucional de activos digitales.
El problema es que todavía existe una barrera para que las instituciones financieras tradicionales entren en cripto: la falta de soluciones estandarizadas de custodia segura de activos. Con esta serie de movimientos, Ripple está allanando el camino y busca convertirse en el intermediario entre las finanzas tradicionales y la blockchain.
¿Hasta dónde puede llegar esta ronda de adquisiciones?
Palisade es compatible con múltiples blockchains y protocolos DeFi, lo que significa que Ripple ya no quiere ser solo un actor de pagos, sino posicionarse como el “proveedor de infraestructuras financieras” del mundo cripto.
Pero, siendo sinceros, sigue siendo una apuesta a largo plazo. ¿Cuándo veremos la adopción a gran escala de soluciones de custodia y pagos cripto a nivel institucional? El mercado aún está observando.
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¿Cuán grandes son las ambiciones de Ripple? Una apuesta de 4.000 millones de dólares por la custodia de activos digitales
La semana pasada Ripple volvió a moverse: adquirió Palisade, un proveedor de monederos digitales y servicios de custodia. No se trata de una operación menor, sino de otro movimiento estratégico de Ripple en el ámbito de la infraestructura institucional, tras una serie de adquisiciones como Hidden Road, Rail y GTreasury.
¿En qué se está gastando el dinero?
Este año, Ripple ha invertido cerca de 4.000 millones de dólares en fusiones y adquisiciones, con una frecuencia de movimientos bastante intensa. Analicemos la lógica detrás de estas adquisiciones:
Estas adquisiciones, en conjunto, cubren prácticamente toda la cadena de valor, desde pagos y trading hasta la custodia.
¿Por qué es tan importante la custodia?
Desde Ripple lo dejan claro: “Una custodia segura de activos digitales es la base para desbloquear la economía cripto”. La pila tecnológica de Palisade utiliza computación multipartita (MPC) y arquitectura de zero-trust, que actualmente es el estándar para la gestión institucional de activos digitales.
El problema es que todavía existe una barrera para que las instituciones financieras tradicionales entren en cripto: la falta de soluciones estandarizadas de custodia segura de activos. Con esta serie de movimientos, Ripple está allanando el camino y busca convertirse en el intermediario entre las finanzas tradicionales y la blockchain.
¿Hasta dónde puede llegar esta ronda de adquisiciones?
Palisade es compatible con múltiples blockchains y protocolos DeFi, lo que significa que Ripple ya no quiere ser solo un actor de pagos, sino posicionarse como el “proveedor de infraestructuras financieras” del mundo cripto.
Pero, siendo sinceros, sigue siendo una apuesta a largo plazo. ¿Cuándo veremos la adopción a gran escala de soluciones de custodia y pagos cripto a nivel institucional? El mercado aún está observando.