He visto este patrón repetirse demasiadas veces ahora. Los proyectos maximizan la extracción, exprimen cada centavo que pueden conseguir. ¿Los usuarios? Se quedan hasta que sus billeteras comienzan a sangrar, luego se van.

Los ingresos se desploman. De repente, el hype del airdrop que funcionó como magia antes ya no tiene el mismo efecto. ¿Entonces, cuál es el movimiento? Lanzar alguna nueva característica brillante, tal vez un pool de staking gamificado o otro token de gobernanza que nadie pidió. Emociona a la gente de nuevo por qué, ¿seis semanas? Dos meses si tienen suerte.

Mientras tanto, el juego real es simple: recaudar esas tarifas de transacción mientras dure la emoción temporal. Luego, observa cómo el ciclo comienza de nuevo cuando los usuarios se dan cuenta de que nada ha cambiado fundamentalmente. Enjuagar, repetir, obtener ganancias de las tarifas hasta que la fuente se agote nuevamente.