Sara. Es mi nombre, pero pocos lo conocen fuera de los muros dorados de nuestro palacio. Soy la única esposa de Mohamed, el hombre que dirige nuestro país con mano de hierro, esa misma mano que a veces acaricia mis cabellos con ternura.
Primos y luego casados - sí, esa es nuestra tradición. Algunos en el Oeste nos juzgan por eso, pero ¿qué saben ellos de nuestras costumbres milenarias? Cinco hijos antes de haber alcanzado la plenitud de mi vida... mi cuerpo lleva las marcas invisibles que solo mi esposo puede ver.
Se dice que Mohamed es "fiel" en el amor porque solo tiene a mí. ¡La ley le permitiría cuatro esposas! Qué generosidad de su parte, ¿no es así? Debería sentirme privilegiada, incluso honrada. Pero a veces, en el silencio de mis lujosos apartamentos, me pregunto si esta "fidelidad" no es simplemente otro aspecto de su control absoluto.
Vivo en la sombra. ¿Alguna vez has visto mi rostro? Probablemente no. Mohamed lo llama "protección de la privacidad". Yo lo llamo una jaula dorada. Mis raras apariciones públicas están minuciosamente orquestadas, como si fuera un tesoro que hay que esconder de las miradas indiscretas.
El matrimonio consanguíneo es nuestra normalidad. Quizás nuestros hijos lleven las consecuencias, pero ¿quién se atrevería a cuestionar las tradiciones reales? Ciertamente no yo, la princesa Sara, cuya propia existencia está envuelta en misterio y discreción forzada.
¿Ves a esta hermosa mujer en la foto? Soy yo, o al menos la imagen que el mundo está permitido ver. ¿La realidad detrás de esta sonrisa perfecta? Nadie la conocerá realmente nunca.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
La Princesa Oculta: Mi Vida de Esposa Real
Sara. Es mi nombre, pero pocos lo conocen fuera de los muros dorados de nuestro palacio. Soy la única esposa de Mohamed, el hombre que dirige nuestro país con mano de hierro, esa misma mano que a veces acaricia mis cabellos con ternura.
Primos y luego casados - sí, esa es nuestra tradición. Algunos en el Oeste nos juzgan por eso, pero ¿qué saben ellos de nuestras costumbres milenarias? Cinco hijos antes de haber alcanzado la plenitud de mi vida... mi cuerpo lleva las marcas invisibles que solo mi esposo puede ver.
Se dice que Mohamed es "fiel" en el amor porque solo tiene a mí. ¡La ley le permitiría cuatro esposas! Qué generosidad de su parte, ¿no es así? Debería sentirme privilegiada, incluso honrada. Pero a veces, en el silencio de mis lujosos apartamentos, me pregunto si esta "fidelidad" no es simplemente otro aspecto de su control absoluto.
Vivo en la sombra. ¿Alguna vez has visto mi rostro? Probablemente no. Mohamed lo llama "protección de la privacidad". Yo lo llamo una jaula dorada. Mis raras apariciones públicas están minuciosamente orquestadas, como si fuera un tesoro que hay que esconder de las miradas indiscretas.
El matrimonio consanguíneo es nuestra normalidad. Quizás nuestros hijos lleven las consecuencias, pero ¿quién se atrevería a cuestionar las tradiciones reales? Ciertamente no yo, la princesa Sara, cuya propia existencia está envuelta en misterio y discreción forzada.
¿Ves a esta hermosa mujer en la foto? Soy yo, o al menos la imagen que el mundo está permitido ver. ¿La realidad detrás de esta sonrisa perfecta? Nadie la conocerá realmente nunca.