La declaración es esencialmente una respuesta formal a la controversia en torno a los Ordinals, la inscripción y el flujo de datos de usos no financieros.
Escrito por: ChandlerZ, Foresight News
Recientemente, el proyecto Bitcoin Core publicó en su foro oficial una declaración conjunta titulada "Estrategia de desarrollo y retransmisión de transacciones de Bitcoin Core", que propone que los usos no financieros en la red de Bitcoin no deberían estar restringidos, y que los mineros y nodos no deberían rechazar la retransmisión y empaquetado de estas transacciones. Lo que se transmite en la declaración es una reafirmación del principio de resistencia a la censura y neutralidad del protocolo de la red Bitcoin. Sin embargo, en el contexto ecológico actual, esta declaración también ha generado una amplia discusión entre desarrolladores y la comunidad.
Desde que el mecanismo de inscripción provocó un auge en 2023, el uso de recursos en la cadena, la congestión de la red y la controversia sobre el derecho a hablar se han convertido en temas centrales en el ecosistema de Bitcoin. El posterior protocolo BRC20 ha impulsado la diversificación de las formas de activos y ha puesto en primer plano las divisiones en torno a las aplicaciones no financieras. La publicación de este anuncio ha reactivado el debate sobre los límites de la red Bitcoin, y si Bitcoin continuará expandiendo el espacio de aplicaciones no nativas en el futuro dependerá de un nivel más profundo de coordinación y consenso entre desarrolladores y usuarios.
¿Qué señales libera la declaración de Bitcoin Core?
Es fácil ver que el anuncio es esencialmente una respuesta formal a la controversia que rodea a los ordinales, el comercio de inscripciones y el tráfico de datos con fines no financieros. La declaración deja claro que la red Bitcoin debe adherirse a los principios de descentralización y resistencia a la censura, el equipo de desarrollo central no tiene derecho a impedir que los usuarios utilicen el espacio en la cadena con fines no financieros, y los operadores de nodos y mineros no deben transmitir o empaquetar selectivamente las transacciones basándose en un juicio subjetivo. Esta postura expresa esencialmente una actitud "tecnológicamente neutral" hacia las inscripciones y otras aplicaciones de datos en la cadena.
En el contexto del anuncio, el movimiento del equipo de Bitcoin Core no es un giro abrupto, sino una continuación de una postura constante sobre la política de retransmisión durante varios años: el papel del software de nodo es garantizar la máxima neutralidad y confiabilidad de la red, en lugar de hacer juicios cualitativos sobre el propósito de las transacciones. Las controversias anteriores en torno a la sobrecarga de datos, la congestión de la red y las altas tarifas que rodean a las inscripciones han formado opiniones muy opuestas dentro de la comunidad. Esta declaración intenta aliviar el desacuerdo de larga data entre los desarrolladores y los operadores de nodos al fortalecer la neutralidad del consenso sin interferir con el tipo de transacción.
Sin embargo, tan pronto como se publicó el anuncio, rápidamente provocó una fuerte respuesta a nivel de la comunidad. Varios desarrolladores y figuras de la industria han expresado diversos grados de insatisfacción e incluso dudas. Jameson Lopp, cofundador de Casa Wallet, cree que los desarrolladores de Bitcoin Core no son una entidad unificada, pero se sospecha que hablar en forma de declaración conjunta pierde la transparencia de gobernanza que deberían tener los proyectos centralizados; Samson Mow, CEO de JAN3, también señaló que la declaración "así es como es" oscurece el hecho de que los desarrolladores están permitiendo gradualmente que la estructura de la red cambie. Luke Dashjr, un conocido desarrollador de Bitcoin Core, fue aún más vocal en sus críticas al objetivo de retransmisión mal diseñado, argumentando que la falta de claridad sobre la definición de "qué transacciones deben reenviarse" conduciría a una mayor confusión en el mecanismo de retransmisión.
Detrás de las discrepancias, en realidad se revela una divergencia fundamental dentro del ecosistema actual de Bitcoin sobre la "posición de la red". Los desarrolladores representados por Carl Horton creen que Bitcoin debería centrarse en su función como un "sistema de efectivo electrónico peer-to-peer", en lugar de ser utilizado como un portador de almacenamiento de datos general. Esto entra en conflicto evidente con prácticas como la inscripción y BRC20. Aunque la declaración actual no apoya directamente este tipo de transacciones no financieras, su actitud de "no intervención" ha sido ampliamente interpretada por el mercado como un aflojamiento implícito de las aplicaciones de expansión en cadena.
A corto plazo, esta declaración puede reducir el comportamiento de los mineros o nodos de excluir subjetivamente las transacciones de inscripción, lo que ayuda a restaurar la inclusión de Ordinals a nivel de red. Sin embargo, a medio y largo plazo, la elección de trayectoria para todo el ecosistema de Bitcoin y la redefinición de las relaciones entre desarrolladores y usuarios aún están por observarse. El juego entre el equipo de desarrollo central y otros actores de la comunidad puede que aún no haya terminado.
Discrepancias internas y cuellos de botella tecnológicos en el ecosistema de Bitcoin
Al revisar la trayectoria de desarrollo del ecosistema de Bitcoin en los últimos años, se puede observar que, aunque ha habido avances en la exploración de innovaciones, la construcción del ecosistema en su conjunto aún enfrenta numerosos problemas estructurales.
Dentro del ecosistema, falta una dirección técnica coherente y un mecanismo de consenso, y las diferencias de postura entre desarrolladores principales, mineros, proveedores de servicios de billetera y la comunidad de usuarios han existido durante mucho tiempo. Debido a las limitadas funciones nativas del protocolo de Bitcoin, nunca se ha logrado un acuerdo unificado sobre si se deben apoyar los usos no financieros, y esta división se manifiesta en una baja aceptación de nuevas tecnologías y un avance lento en la evolución del protocolo, lo que restringe la interconexión del ecosistema y la eficiencia en la construcción.
Las aplicaciones no financieras representadas por las inscripciones y el protocolo BRC20 han inyectado cierta vitalidad a Bitcoin, pero al mismo tiempo, también han traído problemas como el aumento del consumo de recursos y el aumento de la carga en las operaciones de los nodos. Algunos mineros y nodos evitan selectivamente este tipo de transacciones, lo que exacerba el antagonismo entre los participantes de la red. Esta inconsistencia en la tecnología y la postura hace que todo el ecosistema carezca de coordinación y flexibilidad a la hora de abordar aplicaciones emergentes, y es difícil que la innovación tenga un efecto sostenible.
La declaración del equipo de Bitcoin Core de que las transacciones no financieras no deben restringirse ni rechazarse es un intento de intervenir en la situación. Desde un punto de vista ecológico, se espera que esta declaración rompa algunas barreras técnicas y cognitivas, y libere más espacio para el despliegue de nuevos proyectos y la participación de los usuarios. Una vez que los desarrolladores principales hayan dejado clara su oposición a la censura técnica y hayan presionado por una estrategia de retransmisión y empaquetado más neutral, habrá más certidumbre en el camino de desarrollo en torno a las aplicaciones no financieras. Sin embargo, esto no significa que el problema ecológico se resuelva en lo fundamental, por el contrario, si la evolución tecnológica puede implementarse realmente y si la comunidad de desarrolladores puede formar un mecanismo de colaboración efectivo aún determinará si este anuncio puede eventualmente provocar un cambio sustancial.
Nueva forma de jugar, o el punto de inflexión del ecosistema de Bitcoin
Algunos desarrolladores tienen una actitud reservada hacia la declaración recientemente publicada por el proyecto Bitcoin Core, pero la declaración aclara la postura abierta de la red Bitcoin hacia usos no financieros, proporcionando un entorno político relativamente flexible para la innovación ecológica.
Actualmente, el desarrollo de proyectos tradicionales en el ecosistema de Bitcoin se ha ralentizado, y la expansión de la tecnología y las aplicaciones enfrenta ciertas limitaciones. En este contexto, prestar atención a aquellos nuevos proyectos emergentes que puedan aprovechar esta oportunidad de ajuste político podría tener un mayor espacio para el crecimiento. Aunque estas innovaciones han traído algunas controversias, como el impacto en la carga y la estabilidad de la red, también muestran el potencial de desarrollo diversificado de la red de Bitcoin.
Después de todo, lo que mejor sabe hacer el ecosistema Web3 es intentar y crear cosas nuevas constantemente; enfrentar desafíos y explorar nuevas posibilidades podría ser la dirección del futuro.
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¿Se reconocen los usos no financieros? Bitcoin Core declara una nueva reflexión sobre el ecosistema de Bitcoin
Escrito por: ChandlerZ, Foresight News
Recientemente, el proyecto Bitcoin Core publicó en su foro oficial una declaración conjunta titulada "Estrategia de desarrollo y retransmisión de transacciones de Bitcoin Core", que propone que los usos no financieros en la red de Bitcoin no deberían estar restringidos, y que los mineros y nodos no deberían rechazar la retransmisión y empaquetado de estas transacciones. Lo que se transmite en la declaración es una reafirmación del principio de resistencia a la censura y neutralidad del protocolo de la red Bitcoin. Sin embargo, en el contexto ecológico actual, esta declaración también ha generado una amplia discusión entre desarrolladores y la comunidad.
Desde que el mecanismo de inscripción provocó un auge en 2023, el uso de recursos en la cadena, la congestión de la red y la controversia sobre el derecho a hablar se han convertido en temas centrales en el ecosistema de Bitcoin. El posterior protocolo BRC20 ha impulsado la diversificación de las formas de activos y ha puesto en primer plano las divisiones en torno a las aplicaciones no financieras. La publicación de este anuncio ha reactivado el debate sobre los límites de la red Bitcoin, y si Bitcoin continuará expandiendo el espacio de aplicaciones no nativas en el futuro dependerá de un nivel más profundo de coordinación y consenso entre desarrolladores y usuarios.
¿Qué señales libera la declaración de Bitcoin Core?
Es fácil ver que el anuncio es esencialmente una respuesta formal a la controversia que rodea a los ordinales, el comercio de inscripciones y el tráfico de datos con fines no financieros. La declaración deja claro que la red Bitcoin debe adherirse a los principios de descentralización y resistencia a la censura, el equipo de desarrollo central no tiene derecho a impedir que los usuarios utilicen el espacio en la cadena con fines no financieros, y los operadores de nodos y mineros no deben transmitir o empaquetar selectivamente las transacciones basándose en un juicio subjetivo. Esta postura expresa esencialmente una actitud "tecnológicamente neutral" hacia las inscripciones y otras aplicaciones de datos en la cadena.
En el contexto del anuncio, el movimiento del equipo de Bitcoin Core no es un giro abrupto, sino una continuación de una postura constante sobre la política de retransmisión durante varios años: el papel del software de nodo es garantizar la máxima neutralidad y confiabilidad de la red, en lugar de hacer juicios cualitativos sobre el propósito de las transacciones. Las controversias anteriores en torno a la sobrecarga de datos, la congestión de la red y las altas tarifas que rodean a las inscripciones han formado opiniones muy opuestas dentro de la comunidad. Esta declaración intenta aliviar el desacuerdo de larga data entre los desarrolladores y los operadores de nodos al fortalecer la neutralidad del consenso sin interferir con el tipo de transacción.
Sin embargo, tan pronto como se publicó el anuncio, rápidamente provocó una fuerte respuesta a nivel de la comunidad. Varios desarrolladores y figuras de la industria han expresado diversos grados de insatisfacción e incluso dudas. Jameson Lopp, cofundador de Casa Wallet, cree que los desarrolladores de Bitcoin Core no son una entidad unificada, pero se sospecha que hablar en forma de declaración conjunta pierde la transparencia de gobernanza que deberían tener los proyectos centralizados; Samson Mow, CEO de JAN3, también señaló que la declaración "así es como es" oscurece el hecho de que los desarrolladores están permitiendo gradualmente que la estructura de la red cambie. Luke Dashjr, un conocido desarrollador de Bitcoin Core, fue aún más vocal en sus críticas al objetivo de retransmisión mal diseñado, argumentando que la falta de claridad sobre la definición de "qué transacciones deben reenviarse" conduciría a una mayor confusión en el mecanismo de retransmisión.
Detrás de las discrepancias, en realidad se revela una divergencia fundamental dentro del ecosistema actual de Bitcoin sobre la "posición de la red". Los desarrolladores representados por Carl Horton creen que Bitcoin debería centrarse en su función como un "sistema de efectivo electrónico peer-to-peer", en lugar de ser utilizado como un portador de almacenamiento de datos general. Esto entra en conflicto evidente con prácticas como la inscripción y BRC20. Aunque la declaración actual no apoya directamente este tipo de transacciones no financieras, su actitud de "no intervención" ha sido ampliamente interpretada por el mercado como un aflojamiento implícito de las aplicaciones de expansión en cadena.
A corto plazo, esta declaración puede reducir el comportamiento de los mineros o nodos de excluir subjetivamente las transacciones de inscripción, lo que ayuda a restaurar la inclusión de Ordinals a nivel de red. Sin embargo, a medio y largo plazo, la elección de trayectoria para todo el ecosistema de Bitcoin y la redefinición de las relaciones entre desarrolladores y usuarios aún están por observarse. El juego entre el equipo de desarrollo central y otros actores de la comunidad puede que aún no haya terminado.
Discrepancias internas y cuellos de botella tecnológicos en el ecosistema de Bitcoin
Al revisar la trayectoria de desarrollo del ecosistema de Bitcoin en los últimos años, se puede observar que, aunque ha habido avances en la exploración de innovaciones, la construcción del ecosistema en su conjunto aún enfrenta numerosos problemas estructurales.
Dentro del ecosistema, falta una dirección técnica coherente y un mecanismo de consenso, y las diferencias de postura entre desarrolladores principales, mineros, proveedores de servicios de billetera y la comunidad de usuarios han existido durante mucho tiempo. Debido a las limitadas funciones nativas del protocolo de Bitcoin, nunca se ha logrado un acuerdo unificado sobre si se deben apoyar los usos no financieros, y esta división se manifiesta en una baja aceptación de nuevas tecnologías y un avance lento en la evolución del protocolo, lo que restringe la interconexión del ecosistema y la eficiencia en la construcción.
Las aplicaciones no financieras representadas por las inscripciones y el protocolo BRC20 han inyectado cierta vitalidad a Bitcoin, pero al mismo tiempo, también han traído problemas como el aumento del consumo de recursos y el aumento de la carga en las operaciones de los nodos. Algunos mineros y nodos evitan selectivamente este tipo de transacciones, lo que exacerba el antagonismo entre los participantes de la red. Esta inconsistencia en la tecnología y la postura hace que todo el ecosistema carezca de coordinación y flexibilidad a la hora de abordar aplicaciones emergentes, y es difícil que la innovación tenga un efecto sostenible.
La declaración del equipo de Bitcoin Core de que las transacciones no financieras no deben restringirse ni rechazarse es un intento de intervenir en la situación. Desde un punto de vista ecológico, se espera que esta declaración rompa algunas barreras técnicas y cognitivas, y libere más espacio para el despliegue de nuevos proyectos y la participación de los usuarios. Una vez que los desarrolladores principales hayan dejado clara su oposición a la censura técnica y hayan presionado por una estrategia de retransmisión y empaquetado más neutral, habrá más certidumbre en el camino de desarrollo en torno a las aplicaciones no financieras. Sin embargo, esto no significa que el problema ecológico se resuelva en lo fundamental, por el contrario, si la evolución tecnológica puede implementarse realmente y si la comunidad de desarrolladores puede formar un mecanismo de colaboración efectivo aún determinará si este anuncio puede eventualmente provocar un cambio sustancial.
Nueva forma de jugar, o el punto de inflexión del ecosistema de Bitcoin
Algunos desarrolladores tienen una actitud reservada hacia la declaración recientemente publicada por el proyecto Bitcoin Core, pero la declaración aclara la postura abierta de la red Bitcoin hacia usos no financieros, proporcionando un entorno político relativamente flexible para la innovación ecológica.
Actualmente, el desarrollo de proyectos tradicionales en el ecosistema de Bitcoin se ha ralentizado, y la expansión de la tecnología y las aplicaciones enfrenta ciertas limitaciones. En este contexto, prestar atención a aquellos nuevos proyectos emergentes que puedan aprovechar esta oportunidad de ajuste político podría tener un mayor espacio para el crecimiento. Aunque estas innovaciones han traído algunas controversias, como el impacto en la carga y la estabilidad de la red, también muestran el potencial de desarrollo diversificado de la red de Bitcoin.
Después de todo, lo que mejor sabe hacer el ecosistema Web3 es intentar y crear cosas nuevas constantemente; enfrentar desafíos y explorar nuevas posibilidades podría ser la dirección del futuro.