
Al operar con criptomonedas en exchanges centralizados, los traders gestionan dos factores cruciales: el bid-ask spread y el slippage. Comprender estos mecanismos resulta esencial para negociar con eficacia y controlar costes inesperados.
El bid-ask spread representa la diferencia entre el precio más alto que los compradores están dispuestos a pagar (bid price) y el más bajo que los vendedores aceptan (ask price) en el libro de órdenes. Es el indicador principal de liquidez en el mercado.
El ask corresponde al precio mínimo al que un vendedor está dispuesto a vender un activo en el mercado. Si quieres comprar al instante, debes aceptar el ask más bajo disponible. Si quieres vender al instante, recibes el bid más alto vigente.
Comprender el precio ask es clave en el análisis de mercado. Los activos con alta liquidez suelen mostrar un bid-ask spread reducido, lo que significa que la diferencia entre precios de compra y venta es mínima. Así, los traders ejecutan órdenes con menor slippage y menores costes de entrada o salida.
Los market makers son esenciales para proporcionar liquidez y suelen obtener beneficios del bid-ask spread. Su estrategia consiste en comprar y vender activos simultáneamente, capturando la diferencia entre los precios bid y ask.
Al vender a un precio ask más alto y comprar a un precio bid más bajo, los market makers generan beneficios de arbitraje. Esta actividad les aporta ingresos y ayuda a mantener la liquidez, ya que cotizan de forma continua órdenes de compra y venta. Así, otros participantes pueden ejecutar sus órdenes con mayor eficiencia.
Los traders emplean gráficos de profundidad para visualizar el bid-ask spread. Estos gráficos muestran el libro de órdenes de un activo, diferenciando claramente las órdenes de compra y venta.
El espacio entre las áreas de compra y venta en el gráfico representa el bid-ask spread. El volumen de negociación es un indicador fuerte de liquidez: los volúmenes altos suelen ir acompañados de spreads más ajustados. Analizando los gráficos de profundidad, los traders pueden valorar la liquidez actual y tomar decisiones informadas de entrada según el ask vigente.
Para comparar la liquidez de distintas criptomonedas o activos, los traders calculan el bid-ask spread como porcentaje. La fórmula es:
(Precio Ask - Precio Bid) / Precio Ask × 100 = Porcentaje de Bid-Ask Spread
Esta métrica permite comparar objetivamente la liquidez entre activos de precios diversos. Un porcentaje de bid-ask spread más bajo indica mayor liquidez. Por ejemplo, un activo con un spread de 0,1 % es mucho más líquido y barato de negociar que uno con un spread de 2 %. Saber el precio ask es esencial para interpretar correctamente estos datos.
El slippage se produce cuando una operación se ejecuta a un precio distinto al esperado. Es habitual en mercados muy volátiles o con bajo volumen de negociación.
El slippage puede ser negativo o positivo. El slippage positivo ocurre cuando el precio final mejora para el trader (baja en una compra o sube en una venta). Algunas plataformas permiten definir manualmente el nivel de slippage aceptable, lo que influye en el momento de ejecución de la orden.
Para limitar el slippage negativo, aplica estas estrategias: divide las órdenes grandes en varias pequeñas para reducir el impacto en el mercado; considera las comisiones de transacción (que pueden subir por congestión en la blockchain); evita activos de baja liquidez y selecciona mercados con mayor volumen. Utilizar órdenes limitadas en lugar de órdenes a mercado también asegura la ejecución solo al ask preferido o mejor.
Dominar el bid-ask spread y el slippage resulta fundamental para el éxito en el trading de criptomonedas. Comprender el ask y su relación con el bid permite tomar decisiones más inteligentes. Estos factores pueden modificar de forma significativa el coste final de la operación, sobre todo en órdenes grandes. En operaciones pequeñas, el impacto suele ser mínimo, pero en posiciones grandes el precio medio por unidad puede desviarse notablemente de lo esperado.
Los traders deben evaluar siempre la liquidez del mercado, priorizar activos con menor porcentaje de bid-ask spread y usar el tipo de orden adecuado para reducir sorpresas en los costes. Aplicar estrategias de control de slippage y monitorizar el mercado optimiza los resultados y reduce el riesgo ante movimientos adversos de precio. Tener claro el ask y otros conceptos clave de negociación es esencial para un enfoque profesional en el mercado cripto.
Un Automated Control System (ACS) integra equipos gestionados y automatización. Estos sistemas mejoran la eficiencia al permitir que operadores humanos y dispositivos automatizados realicen conjuntamente tareas de control y regulación.
Un ACS de clase 1 es un sistema de un solo ordenador y varios usuarios, sin conexión a redes corporativas ni a Internet. Opera de forma independiente y solo admite actividad local de usuarios.
Un sistema de control automatizado está diseñado para optimizar y acelerar los procesos de gestión. Automatiza la gestión de datos, mejora la eficiencia operativa y permite la toma de decisiones en tiempo real basada en información actualizada.









